lunes, 27 de septiembre de 2010

Preparémonos para la invasión

Hace tal que una hora y media que me he encontrado en la Plaza Mayor de Salamanca con un amigo, Álvaro. Nos hemos puesto a charlar (fijaos si hemos charlado, que nos hemos encontrado siendo de día, se han encendido las luces de la plaza en nuestra presencia y ha anochecido. Qué tierno todo) de temas variados. Hemos dicho muchas paridas, hemos planeado viajes para hacer los compis de la facultad... pero cuando me ha contado lo que ha visto hoy en las noticias (yo no suelo ver el telediario, lo confieso) he tenido que venir a casa a comprobar que no me tomaba el pelo. Y, desgraciadamente, no bromeaba

La ONU designará a una embajadora para posibles contactos con alienígenas

La astrofísica malasia Mazlan Othman será designada en próximas fechas como embajadora de Naciones Unidas para el Espacio, y se encargará de coordinar la respuesta de la Humanidad en el momento en el que se produzca un contacto con una raza alienígena. 

Othman, actual directora de la Oficina de Naciones Unidas para el Espacio Exterior (UNOOSA), explicará en profundidad las competencias de su nuevo cargo en una conferencia ante la Royal Society en el condado de Buckinhghamshire (Inglaterra) la próxima semana. 

 Para leer el resto de la noticia, aquí.

¿Qué puedo decir? ¿Cuál es mi opinión al respecto? Que el mundo es una tomadura de pelo, básicamente. Vamos a ver, una tía se acaba de sacar de la manga un cargo (porque además ha sido idea suya :D) por el que cobrará infinitamente más que lo que nosotros podamos aspirar, ¿para qué? Personalmente, estoy deseando que los aliens vengan. Quiero verla alardeando de su trabajo frente a los hombrecillos verdes.

Ajiem.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

Preguntas

Asegura mi médico que es un milagro que la oreja sea oreja todos los días. O que la nariz sea nariz, y así sucesivamente. No es que quiera decir que lo normal es que la oreja sea un día patata y otro zanahoria, sino que para mantener esa rutina orgánica es preciso un mecanismo cuya complejidad es lo que nos hace a usted y a mí prácticamente incomprensibles. Y lleva razón mi médico. Personalmente, me parece asombroso que la Luna salga todas las noches, y que los astros funcionen con la precisión de un reloj suizo. Lo normal es que cada día giraran a una velocidad diferente, incluso que algunos días no giraran. Y que los asteroides chocaran unos con otros todo el rato, como los automóviles en la operación retorno. Pero ahí los tienen ustedes, repitiendo cada hora lo mismo, con una exactitud que no sabemos a qué se debe ni cuánto tiempo más piensa durar.

Nuestro cuerpo es como una maqueta del universo. Para que nos levantemos de la cama y cojamos el autobús y hagamos, en fin, las tonterías que solemos hacer en el despacho, tienen que ponerse en funcionamiento millones y millones de recursos y células cuya mecánica ignoramos. Lo más probable es que si la biología no mantuviera una presión constante sobre el pie, éste amanecería convertido unas veces en nabo y otras en remolacha. Tiene que ser muy costoso que se mantenga con sus cinco dedos y sus uñas, siempre idéntico a sí mismo. Los juanetes son una tontería. Lo verdaderamente milagroso es que no sea todo juanete. O todo callo.

Sería fantástico poder trasladar este equilibrio orgánico a la psicología. Que cada día nos levantáramos con el mismo estado de ánimo, quiero decir. Si todas las semanas tenemos el mismo número de dientes en la boca, y el mismo número de lenguas y de papilas gustativas, ¿sería mucho pedir que, una vez alcanzado un carácter aceptable, nos despertáramos todos los días con él? ¿Por qué unas mañanas estamos tristes y otras alegres? ¿Por qué hay jornadas en las que no saldríamos de la cama, mientras que otras estamos deseando que amanezca para ponernos a trabajar? ¿Por qué, en lo psíquico, la oreja no es siempre oreja ni el párpado párpado cada día? ¿Por qué somos una catástrofe psicológica, mientras que desde el punto de vista físico mostramos una estabilidad envidiable?

Es más, puestos a elegir, yo preferiría que la estabilidad de mis órganos se trasladara a mi modo de ser, aun al precio de que el hígado fuera unos días hígado y otros una planta carnívora, o los riñones amanecieran convertidos en roca los lunes, miércoles y viernes. Por cierto, ¿por qué los jueves siempre son jueves? ¿Qué clase de glándula les proporciona esa increíble estabilidad? ¿Cómo es posible que ningún jueves, que yo sepa, haya amanecido lunes o ningún marzo abril? ¿Por qué usted no es yo algunos días? ¿Por qué yo soy incapaz de amanecer usted? Todo son preguntas.

Juan José Millás (Articuentos)

lunes, 20 de septiembre de 2010

4 añazos

Nota Informativa: la entrada que se publica ahora mismo está escrita desde el día 15, pero varias conjuras dignas de Catilina en mi contra han impedido que la publicara hasta ahora, como es lógico :D

“ER21 es una banda de Pop que busca el estrellato desde 15/09/2006”


Un buen día como hoy, hace cuatro años, alguien tuvo la gran idea de pasarme el Popomundo. Me hizo gracia, y se lo pasé a mi prima. A mi prima le hizo gracia, y te lo pasó a ti. Y así nos conocimos, grandísima petarda. Llevo cuaaatro largos años aguantándote y queriendo librarme de ti ò____Ó

Esto... ¡vale! Ya sabes que ponerme ñoña no se me da demasiado bien. ¿O acaso no recuerdas lo de...? Sí, sí, aquella vez que te dediqué una entrada toda bonita por tu cumpleaños, ñoña a más no poder, y mientras la leías, me tenías a mí de fondo gritando: ¡TUS MEDIAS SON COMESTIBLES, QUIERO COMERME TUS MEDIAAAAAS!



Creo que haciendo público eso he acabado con la nula reputación que tengo. En fin :D

Cuatro años. Cómo hemos cambiado desde entonces, y como ha cambiado todo... excepto que seguimos ahí, las dos. Y por eso, un día como el de hoy merece un pequeño homenaje de recuerdos.

Recuerdo, por ejemplo, aquella “primera vez” xD Aquel primer cine en el que llamé para ver dónde estábais y se te oía de fondo: “¿quién es? ¿quién es? ¿quién eees?”. Recuerdo que aquel día, viendo Noche En El Museo, al dar las cinco en el cine, empecé a gritar:

- ¡SON LAS CINCO, ESTOY DE PARTO, SOY MADREEEE!

Y tú...

- ¡SON LAS CINCO, ERES MADREEE! ¿CÓMO LE VAS A LLAMAR?

Cosa que no sabía porque no sabíamos el género del bebé, pero da lo mismo :D

Recuerdo cómo traducías todo lo que pillabas en japonés. Eso sí, lo traducías a tu manera.


Recuerdo... ¡el sandwich de queso solidificado!

Y los zumos de naranja deliciosos.

Recuerdo aquel día en la estación de Santander, puteándonos mutuamente. Acabé arañándote y tú, mordiéndome. Y así surgieron Gata & Loba xDDD

Recuerdo:
- Zorraca. 
- Perraca.

No recuerdo tu color de pelo natural, básicamente porque siempre te lo tiñes, descerebrada ò_Ó Pero recuerdo que me metí contigo durante tu etapa rubia, y tú conmigo durante la mía.

Recuerdo nuestros comienzos en el Media, donde empezó nuestra gran historia del Nincqea. Recuerdo la mofa de la boda y lo de la playa. “¿Vas de guay o qué?” xDD

Recuerdo estar tirada en el suelo, gritando y pataleando, mientras tú me agarrabas y me prohibías comer chocolate ò.Ó Y mi primo pequeño flipaba. Y de fondo sonaba la banda sonora de Sweeney Todd.

Recuerdo grandes aciertos, como Rec. Y la cara de susto de la gente al ver nuestras caras de susto al salir. Y otros aciertos, como El Orfanato. También recuerdo desastres varios, como La Brújula Dorada (aunque bien que te reíste, perra) o Zohan, Licencia para Peinar xD

Recuerdo discutir: “Yo soy Mi y tú eres Ti”, “¡no! Yo soy Mi y tú eres Ti”, “¡NOOO...!”, y los amigos de mi hermana intentando convencernos de que ambas éramos Mi y Ti.

Recuerdo cuando nuestros padres perdieron la cabeza totalmente y nos permitieron irnos juntas a Canadá. Recuerdo la gran parida de aquel viaje:

- ¡Oh, la torre CN, estamos yendo hacia el sur!
- No, antes, desde el otro lado, íbamos hacia el sur. Ahora que volvemos vamos hacia el norte. 
- … no me líes, para mí a partir de ahora la torre CN es el Sur ò_Ó 
- ¿Qué? ¿Cómo que el sur? XDD 
- Sí, y a partir de eso se creó el resto del mundo ò_Ó


 
*voz de guía turística* 
 - Y a la izquierda, como pueden comprobar, con todos usted... ¡EL SUR! 
- Y a la derecha el norte, ¿no? 
- No, tío, no pillas la coña ¬¬

Recuerdo estar arriba en la torre CN, tomando un vaso de agua (pedir otra cosa habría sido lo mismo que hipotecarnos de por vida e.e) y empezamos a cantar: “What a beautiful wedding...” (“Qué bonita boda...”). El camarero nos miró alucinados, pero luego nos invitó a un zumo de naranja *-*


Y nos plantamos en un banquete de boda en un hotel de lujo... en pijama. Y tú ibas por ahí con la almohada y le querías regalar un anillo a la boda. ¡Y nos invitaron a entrar! Y estuvimos subiendo y bajando en el ascensor a propósito para que se nos revolviera el estómago.

Y esa tarde en el Mambo (gran nombre donde los haya xD), donde nos dieron la única copa alcohólica que he sido capaz de acabar sin morirme del asco, por lo que amas a aquel hombre. Sobre todo porque nos invitó cuando era ilegal que nosotras bebiéramos alcohol :D 

Y El Embrujo Flamenco, ¡oooh! Con aquella camarera que me guiñó el ojo y me sacó la lengua, provocando que me muriera y metiera la cabeza en mi bolso, literalmente. Y tú descojonándote. Pero luego me descojoné yo de ti cuando lo de: “chupa, chupa, chupa, ahí, chupa...”. Pero claaaro, tú te referías a que el choricillo cogiera la salsa. Y aquel último día allí, hablando con el camarero a la velocidad de la luz... sobre ti. Y tú mirándonos mal xD

Recuerdo que vimos PD. Te Quiero... y me odiaste porque lloraste con la peli. Y haciéndome mimines en el pelo conseguiste que me quedara dormida en pleno centro comercial ò_Ó Y nos escapamos mil veces, porque preferíamos estar en la playa o probando a bajarnos en cualquier parada de metro para descubrir mundo, en lugar de ir al apasionante museo del zapato.

Recuerdo que nos invadió una furia asesina cuando nos hicieron marcharnos de las maravillosísimas cataratas del Niágara antes de tiempo para llevarnos de compras. Y eso que nos habían llevado de compras todos los días desde que habíamos llegado. Cómo le cogimos asco a los malditos outlets.
 

Recuerdo que nos llevaron al parque de atracciones de Wonderland, pero claro, tú odias las montañas rusas. Así que acabamos subidas en los rápidos tres veces seguidas... así que empapadas. Y luego empezó a llover y no había dónde resguardarse.


Recuerdo aquel día que decidimos cruzar en un mal momento y nos quedamos atrapadas en mitad de la calle, mientras que por la derecha se nos acercaba una furgoneta enooorme, y por la izquierda, el tranvía. No sé cómo sobrevivimos. Pero sí sé que entramos en la tienda con la risa floja, y que a ti te duróóóó mucho. Creo que estábamos un poco nerviosas :D

Y recuerdo que Jess dijo que como yo me iba a la universidad, dejaríamos de ser amigas. Y después de todo... me encantaría ponerme en contacto para decirle: “te equivocaste con nosotras, listillo. Te equivocaste MUCHO”. (hasta aquí recuerdos de Canadá)

Recuerdo que, aunque no conseguí que vieras Mi Vida Sin Mí (pero todo se andará :D) sí conseguí que vieras Camino, y bien que te enamoraste de la película. Y creo que esa vez no me odiaste tanto por hacer que lloraras con una película.

Recuerdo cómo empezó la coña de Kristen Stewart, con un afortunado comentario como “¡es que es inválida de caraaaaaa!”. Recuerdo que estando yo en Bruselas, una noche que empezamos a despedirnos... la cosa acabó mucho más tarde porque se nos empezó a ir la pinza con esa coña. Y de hecho, fue cuando hiciste el icono de Kristen de todas las maneras xD


 
Y aunque me dejo miiiil cosas, ya son muchas las que están ahí. En sólo cuatro años. Espera, ¿cuatro años es poco? Depende de cómo se mire. Pero en el fondo eso da igual, porque cuatros los primeros. Y los que nos quedan *______*

Y además, más vale una imagen que mil palabras... (conste que he sido buena con las fotos. Revisando las fotos viejas he encontrado cada cosa horrorosa... xD)





 
…¡el quince de septieeeembreeee es nuestro aniversaaaariooooo!

Sí, te solté la misma parida el otro día, cuando me convertiste en una zombie-adicta, pero da lo mismo, tenía que soltarla otra vez :D

Mi quiere a Tiii (LLLL)

martes, 14 de septiembre de 2010

Retos Personales

  1. Ir a Egipto y recorrerlo ò_ó
  2. Subir a la cruz de La Viorna (y no perderme por el camino)
  3. Hacer el Camino de Santiago.
  4. Ver la Catedral de León *____*
  5. Ir a Machu Picchu.
  6. Subir hasta Machu Picchu andando.
  7. Ir a Olso (asuntos pendientes).
  8. Volver a Islandia y recorrer toda la isla.
  9. Ir a Grecia.
  10. Ver el Taj Majal en directo.
  11. Ir a Nueva York.
  12. Ir a Turquía.
  13. Ir a Praga.
  14. Ir a Viena.
  15. Ir al Sahara.
  16. Ir al Amazonas.
    (Lo sé, quiero ir a muchos sitios :D)
  17. Ir a Granada (eso al menos espero conseguirlo ò.ó)
  18. Traducir un libro.
  19. Traducir una peli.
  20. Llevar a mi hermana al zoo de Madrid.
  21. Sobrevivir al hecho de vivir en Madrid.
  22. Acabar de hacer la historia del Nincqea y escribirla con Ti.
  23. Escribir un libro (otro, aparte del de Nincqea. Y bueh, no hace falta que me lo publiquen).
  24. Volver a pintar al óleo.
  25. Aprender a tocar el piano.
  26. Aprender alemán en tiempo récord.
  27. Atreverme a subir al Speed.
  28. Adelgazar.
  29. Ahorrar .
  30. Ver el musical de Mamma Mia en inglés.
  31. Ver el musical de Wicked.
  32. Ver el musical de Billy Elliot.
  33. Ver el musical de Los Miserables.
  34. Ver el musical de RENT *__________*
  35. Enamorarme.
  36. Ser correspondida, para variar.
  37. Probar las setas alucinógenas xD
  38. Lanzarme en parapente-
  39. Tener el Rey León en DVD original ò_Ó
  40. Hacerme con una Vespa *____*
  41. Que me tomen por inglesa de lo maravillosamente que hablo inglés.
  42. Lo mismo, pero con el francés, el italiano, el alemán y el griego.
  43. Detener el gafismo de mi familia.
  44. Saber algo más de historia.
  45. Estudiar Egiptología.
  46. Vivir durante un tiempo en Oxford.
  47. Cuidar bien de mi gata.
  48. Acabar la colección de Calvin & Hobbes (¡sólo me quedan 9 tomos... de diez! :D )
  49. Aprender alguna de tooodas (que no son pocas :D) las artes marciales que existen.
  50. Dominar el fotosó.
  51. Hacerme con unos patines de patinaje artístico y volver a patinar.
  52. Hablar en público sin morirme de miedo.
  53. Trabajar en algún Disneyland.
    54. Tener una casa de muñecas.

No están en orden de preferencia, excepto el primero, la verdad. Y con el tiempo aparecerán más, y otros puede que desaparezcan... pero ahí queda. 53 por el momento. Algunos sencillos, otros complicadísimos. ¿Cuántos seré capaz de cumplir?

jueves, 9 de septiembre de 2010

Smile

Examen. Enfado. Indignación. Final. Comienzo. Sonreír. Salir. Preguntar. Charlar. Tomar. Debatir. Bromear. Sonreír. Quedar. Pasear. Cocinar. Descansar. Mensajes. Salir otra vez. Preguntar. Pasear. Charlar. De todo y de nada. Llueve. No pasa nada. Comprar. Arrepentirse. Pasar del tema. Llamada. Sonreír. Correr. Agua. Otra llamada. Apúff. Timbre. Colgar. Abrir. Abrazo. Sonreír. Enseñar. Explicar. Cocinar. Cenar. Ponerse al día. Correr. Vestirse. Gritar. Salir, que ya es la hora. Recoger. Daniels. Más mensajes. Sonreír. Flipar. Gente. Reencontrarse. Recordar. Fotos. Sonreír, ¡reír! Cantar. Bailar, alguien. Volver a ver. Cuánto tiempo. Cansancio. Besos. Irse. Ascensor. Dormir. Sonreír... Un nuevo día más. Un año más.

lunes, 6 de septiembre de 2010

Hablando con animales

Hablando "con", sí, sí. Nooo, no "de". En serio, sé lo que digo (por una vez en mi vida).

Nunca había notado que tengo cierta tendencia a hablar con los animales, más que nada porque todo el mundo lo hace (aunque luego lo niegue y lo oculte). Si no, ¿de dónde viene la mítica frase de "por qué hablamos a los niños y a los animales como si fueran retrasados"? Y es verdad, lo hacemos. Pero no es eso lo que yo pretendo contar.

Cuando era pequeña, de camino al colegio, yo llevaba siempre la misma ruta con mi madre. En aquella ruta había varias paradas, entre ellas, saludar a los pollitos de la tienda de animales y luego a los perros enormes blancos (siempre he querido tener uno de esos *-*). Un día, ingenua de mí, le conté este detalle a Laura, lo que desencadenó un ataque de risa por su parte y un trauma para mí: "¡A esos pollitos se los comen!". ¿Cómo se los van a comer?, me preguntaba yo. Están en la tienda de animales, son para que la gente los adopte. Siempre había creído eso y nunca me lo había vuelto a plantear hasta que Laura decidió sacarme de mi error violentamente de a mi tierna edad de... cerca ya de los 18 :D

Otra de las cosas que me dijo Laura (maldita seas, Ti) fue que yo era igualita a Kylian (quien no sepa quién es Kylian, que se joda). Que no era original en absoluto, que ella era como yo de pequeña. Y de mayor la verdad es que también.

Eso me traumatizó bastante. Vamos a ver, ¿tan mal estoy? ¿Tan poco cuerda? Lo negué todo ante Laura y decidí no volver a pensar en el traumático tema.

Hasta que el otro día, en el pueblo ese de la entrada anterior, fui a ruta a caballo con mi hermana. Antes de darme cuenta, estaba manteniendo una conversación de lo más profunda con el caballito: "No, no, no. Nada de pararte a comer, me da igual, ¡y no me vengas con que Fulanito lo hace! Aquí se hace lo que yo diga". Fijaos qué charla, cuando la mayoría de la gente como mucho les dice "buen chico" y a correr, que para algo son caballos y no animales con capacidad para hablar.

Las risas de mi hermana, que iba delante de mí, me sacaron de mi charla y me llevaron a una especie de trance. Repito que maldita seas, Laura, porque tenías razón. Anoche te lo confirmé por teléfono y ahora lo hago público: estoy loca, irremediablemente loca. Tal vez deba aconsejaros que no os acerquéis demasiado, que a lo mejor me pongo violenta y todo. A saber. Sé que estoy loca. No sé cuánto. Aunque sospecho que mucho.

La cosa es que esta semana o la que viene me darán a mi gatita. Y mientras iba a caballo, empecé a preocuparme por ella (y aún no la he achuchado nunca, fijaos qué mona soy preocupándome por ella *-*) porque si esas charlas ya las tengo con el caballo que acabo de conocer, ¿qué hablaré con ella cuando ya lleve un mes en mi casa? ¿La hablaré como si fuera retrasada? O peor, ¿la hablaré como si creyera que entiende lo que le digo, que tiene opiniones al respecto y que de algún modo, me las hará saber? Lo cierto es que yo estoy emocionadísima con su llegada, estoy deseando compartir con ella mi visión del sentido de la vida.

Y todo esto comenzó en el camino al colegio. Lo que ha hecho mi madre de mí sin darse cuenta. Si ella supiera...