viernes, 4 de febrero de 2011

Silver girl



Sail on, silver girl
Sail on by
Your time has come to shine
And your dreams are on the way



Me encanta mirar hacia arriba y ver estrellas en el cielo. Pero sobre todo adoro cuando la noche es clara y limpia, y se ven también otras tantas que son más pequeñitas o están más lejos. Adoro no poder contar con los dedos todas las que alcanzo a ver, perder la cuenta de esos diminutos puntos brillantes que hay sobre mí.

Me hacen sentir pequeña. Con lo enorme que es este mundo... Pero no insignificante. En este inmenso mundo por narices tiene que haber un hueco para mí. Si caben tantas estrellas... Y si es tan grande, hay espacio de sobra para las opciones y oportunidades, ¿no?




Lo malo de ir contemplando las estrellas durante un aburrido y largo viaje de autobús, es que aunque no haya montañas que dificulten la vista, el interior del vehículo se refleja en la ventanilla y hay que mirar hacia arriba. Cuand me he querido dar cuenta llevaba descuellada 20 minutos. Ahora me duele el cuello. Cagoentó ò.Ó


1 comentario:

Marta. Repostería Tximeleta dijo...

Si te gusa ver las estrellas, te encantaría Lanzarote. Con la poca luz y contaminación que hay se ven perfectamente *_*